El 5 Marzo, el Gobernador Brad Little promulgó la “Ley de Condenas Injustas ”, que proporciona una compensación estatal para los condenados injustamente en Idaho. Esto convierte a Idaho en el estado número 36 en adoptar una ley de compensación por condena injusta.
La ceremonia se llevó a cabo en el Palacio de Justicia del Condado de Bonneville en Idaho Falls, la ciudad natal de Christopher Tapp, quien pasó 20 años encarcelado injustamente hasta que fue exonerado en el año 2019. Tapp fue exonerado de los cargos de asesinato en base a nuevas pruebas de ADN que identificaron al verdadero autor del crimen. Años después de que el Sr. Tapp fuera obligado a confesar falsamente y fuera condenado a pesar de que no habían pruebas físicas que lo relacionarán directamente con el crimen.
“Esta ley brindará asistencia a las personas condenadas injustamente para reiniciar sus vidas y ayudar a comenzar el proceso de superar la pesadilla que hemos soportado y que seguimos experimentando”, dijo Christopher Tapp. “Estoy agradecido de saber que en el futuro, cuando alguien sea exonerado, esta legislación estará vigente para ayudar cuando más lo necesiten”.
Junto con su compañero también exonerado en Idaho, Charles Fain, el Sr. Tapp ha sido un firme defensor de esta legislación, trabajando con el Innocence Project y el Innocence Project de Idaho para convertir este proyecto en ley.
La nueva ley, que fue patrocinada por el Senador Doug Ricks y la Representante Barbara Ehardt, incluye una suma fija de $62,000 por cada año de encarcelamiento injusto o $75,000 por cada año cumplido injustamente en el corredor de la muerte. La cantidad promedio ofrecida a nivel nacional a través de las leyes estatales de compensación es de $68,000 por año de encarcelamiento injusto. Además de Washington DC, 18 estados ofrecen $50,000 o más por cada año de encarcelamiento injusto con varias leyes que brindan compensación adicional por los años cumplidos en el corredor de la muerte o pasados bajo supervisión posterior a la liberación.
La nueva ley de Idaho también compensa $25,000 por año malgastados en el registro de delincuentes sexuales o bajo supervisión posterior a la liberación. Todos los reclamos de compensación serán procesados por los tribunales.
Para los exonerados de Idaho como el Sr. Fain y el Sr. Tapp, el castigo por condena injusta continúa incluso después de que se haya confirmado su inocencia y hayan sido liberados de la prisión. Sin compensación, quedan sin apoyo para sus necesidades básicas como vivienda, transporte, servicios de salud o seguro. Los exonerados a menudo también quedan con antecedentes penales que rara vez se borran a pesar de su inocencia. La compensación ayuda a los exonerados a reconstruir las vidas que perdieron y reconoce los horrores que sobrevivieron después de una condena injusta.